Las multas por las altas pérdidas de energía que Dirección
provincial de Energía (DPEC) le paga mensualmente a CAMMESA (Compañía
Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico) alcanzarían los cinco millones
de pesos en enero. Las últimas de 2011 rondaban, los $3.000.000. A este fuerte
desembolso se le agregaría unos 800.000 pesos que corresponderían a la quita de
los subsidios nacionales. La electricidad consumida por Corrientes cada 30 días
según se desprende de datos del mayorista (CAMMESA) rondaría los $15 millones.
Cabe destacar que dentro de las pérdidas se encuentran los
"enganchados", uno de los cuales es el Ministro de Hacienda
correntino, Enrique Vaz Torres, a quien se le descubrió que se encuentra
enganchado a la red, no tiene medidor sino una línea directa, y curiosamente es
el funcionario uno de los que más insiste en el uso racional de la energía.
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Las multas operan luego que principios de 2008 la DPEC
suscribiera un "programa nacional de uso racional de la energía",
comprometiéndose a una reducción de pérdidas para evitar nuevas subas del
precio mayorista. El grueso más importante de las pérdidas se produce por la
electricidad que se consume y no se registra. No pocos creen que la DPEC en
lugar de bajar pérdidas mediante la eliminación de consumos no registrados,
solamente se dedicaría a maquillarlas para que se noten menos.
El maquillaje consistiría en anotar las pérdidas como
electricidad que se consume y se registra. Dicen que allí tal vez estaría una
gran parte de la ratería interna y también algunos favores políticos.
Como dato se recuerda hace diez años atrás el proceso
“Dohrmann Germán Guillermo; Miquelarena Eduardo g.; Luchelli Gerónimo Emilio
p/supuesta asociación ilícita y fraude en perjuicio de la administración
pública - capital” - expediente Nº 40.935 del j.i.6 - el auto de procesamiento
tiene fecha 13 de agosto de 2001, jueza Nº 6 Noel Costa.
En aquella oportunidad los beneficiados por la ratería eran
usuarios con irregularidades en los medidores, que descargaban un promedio de
2500 kw por cliente cada bimestre, existían unos 400 en esa condición. Hoy sin
denuncias penales a la vista, la situación no se habría modificado demasiado.
Nuevos clientes o rateros, siguen provocando pérdidas de energía. No solo que
no se disminuye, sino que se incrementan. Y CAMMESA sigue cobrando su multa. A
cinco millones mensuales, el promedio anual alcanzaría a los 60.000.000 en
2012.
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