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Francisco Escobar tenía 25 años y Mauro Ojeda 19. Fueron las víctimas fatales de la violenta represión en el puente y su continuidad en la avenida 3 de Abril. Sus familiares continúan reclamando justicia.
Hace exactamente 11 años resiste en la memoria el paso del tiempo sin justicia por dos chicos muertos, los más de 30 heridos de bala de plomo y los cientos de afectados por el brutal embate de
A más de una década, la causa no tiene imputados y un conducto internacional por los derechos humanos es una esperanza que aún se mantiene viva para condenar el hecho.
Por eso, esta tarde diversas organizaciones sociales y de derechos humanos realizarán un acto frente a las cruces que recuerdan a Francisco Escobar y Mauro Ojeda, los humildes jóvenes muertos en la violenta mañana del 17 de diciembre del convulsionado año 1999. El reclamo de justicia volverá a reiterarse, como también la reivindicación de la lucha que unió a múltiples sectores en
Ante la paralización de la causa, en 2005 un grupo de víctimas con el patrocinio de
“Debemos decir que ante el silencio cómplice y la inacción de las instituciones de
“Por ello -agregan- se han reanudado las tareas de relevamiento socio ambiental de los damnificados. Confiamos en encontrar en los estrados internacionales la justicia que nuestro país nos ha denegado”, reclamaron.
En este sentido, invitaron a la concentración frente a las cruces de avenida 3 de Abril y calle Chaco, donde se realizará un acto a partir de las 19. Posteriormente se realizará un festival en la zona de plaza Belgrano.
Represión
A una semana de asumido el gobierno de Fernando de
Los gases, las balas de goma y las corridas se derramaron por la avenida 3 de Abril y calles adyacentes, hasta que empezaron los tiros de bala de plomo, los heridos, los muertos. El caos se había apoderado de esa zona y la bronca acumulada por el sangriento atropello generó una resistencia por horas. Las barricadas se diseminaron por la avenida hasta pasado el mediodía, momento en que comenzó una mediación que llevó a un final pacífico y sin más muertes.
Once años después se mantiene la impunidad y el reclamo de justicia.
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